En el sudeste de la Provincia de Buenos Aires, en el Escondido del los Tres Leones, los Andresen descubrieron que era factible compartir con turistas, familiares y amigos el aire libre de la naturaleza y su tranquilidad. Es parte de lo que fuera la Estancia de Don Federico Andresen y familia, mezcla de hábitos dano-argentinos, con confort básico rodeada de exuberante vegetación, se rescatan peculiares características de los sembradíos de las tierras productivas de la zona.
A solo 3 km la centenaria Estación Ferroviaria Lumb, con sólo 3 habitantes, con su arquitectura de rasgos ingleses, estar en el lugar es trasladarse pasajeramente a 1908 y volver al presente para visitar a la virgen de Fátima restaurada recientemente. Imposible dejar de mencionar que a 13km se encuentra Nicanor Olivera (La Dulce), con su Centro de Convenciones de la Cooperativa de Seguros La Dulce, otras Instituciones, comercios, y su pileta descubierta que posibilitan interactuar con su cordiales pobladores. A 73 km el núcleo urbano Necochea – Quequén con extensas playas, arenas, sol y mar se conjugan con el verde boscoso y las aguas del Río Quequén y equipamiento para múltiples actividades urbanas.
Tiene en su entorno inmediato recursos naturales de particular belleza: desde el campo propiamente o el camino Lumb a La Dulce que permite visualizar la geografía con ondulaciones y barrancas que emergen en la llanura, por ser parte del Sistema de Tandilia, entre ellas las barrancas del Malal Tuel – conocidas por la leyenda del gaucho apodado “Ñandú” que fuera perseguido por los indios -. El Río Quequén Grande serpentea en las cercanías, entre los verdes, amarillos, terracotas y el celeste del cielo, sus saltos permiten travesías en kayak a contratar; el río con sus hitos en la zona : el Paso Media Luna que con su Puente Negro o Perdido es ideal para pescar, tomar sol y unos lindos mates debajo de su arboleda; el Balneario José Werndl aparece junto al Puente Blanco en la Ruta pasando el Cruce a La Dulce, antes de llegar al camino de ingreso de Juan N. Fernández. El balneario en temporada de verano cuenta con servicio de guardavidas, poseyendo equipamiento de apoyo para camping, sectores para asados, muelle de pesca – los pejerreyes suelen tener cerca de los 700 grs.- , saltos de agua, piletones naturales entre piedras, lugares para disfrutar el reparo de las barrancas y la frescura del agua para bañarse o practicar remo, kayak, etc.
Como parte del Corredor Danés se comparten eventos promovidos por integrantes de la colectividad: tradicionales romerías de la Fiesta de Verano “Sommerfest”, ya sea la de La Dulce o la del Club de Campo Sociedad Parque Danesa “Dannevirke” de Lumb, San Cayetano. Ésta institución se encuentra en un período de expansión, desarrollo gracias a la ardua tarea de quienes componen una comisión que lleva a cabo eventos sociales, culturales y de capacitación. En la actualidad están organizando la “Fiesta del Reencuentro de Jugadores de Hándbol y atletas de la región”, además de su nutrido calendario en carnaval, fiesta de San Juan, fiesta por el día del Productor Agropecuario y aniversario del lugar; terminando el año con la “Cena de Fin de Año en el Club Dannevirke”; ésta última propone vivir los últimos minutos del año, rodeados de la naturaleza con el verde añejo pero vivo, espléndido por su vegetación, el agua de su laguna y sus interesantes y conservadas instalaciones, donde es posible arribar el Año Nuevo con esperanza y alegría. Muy cerca de él, se puede ir a la amplia Laguna La Vizcacha, con su ribera para pesca deportiva y para avistaje de aves.
Transitando, se disfrutan las fértiles tierras, importantes en producción agrícola ganadera, resultado de años de trabajo. Diferentes culturas se integraron, entre ellas los daneses y sus descendientes, aún hoy se denotan costumbres que trascienden el ámbito laboral y enmarcan el modo de vida; es observable en El Escondido pequeños signos: las banderas Argentina y Danesa que lucen expresando una cordial convivencia, el verde con diversas especies conformando espacios ideales para el descanso– pensados y luego desarrollados con características singulares-, además la casa principal permite vivenciar calidez en sus ambientes, incluyendo el hogar, la salamandra y la típica cocina a leña entre otros.
Ofrece además, la posibilidad de encontrarse con uno mismo, en una casa, un parque con diversas especies, la pileta rural y siempre en su derredor la libertad del campo con amaneceres y atardeceres maravillosos. A su alcance, casa de campo “El Escondido” en Lumb – La Dulce- Partido de Necochea, le propone disfrutar días en el amplio estar con gran vista al verde, con su ventana a la pampa, su comedor diario y cocina, con capacidad de alojamiento hasta ocho personas. “Es posible, decidir donde disfrutar, el parque, el sector de los frutales es una opción para dormir la siesta o porque no debajo de la sombra de los cedros y quizás tomando unos mates cerca de la pileta rural, viendo el campo abierto que termina en el horizonte, para complacerse con el sabor típico, revitalizando nuestra identidad.